Te doy 5 consejos muy básicos para no sufrir estrés post-vacacional al final del verano, apúntalos!
Yo creo que a todos y todas nos pasa que Septiembre es un mes que trae consigo muchos sentimientos encontrados. Por un lado, nos despedimos del verano, de las vacaciones, del tiempo de desconexión y relax. Por otro, nos enfrentamos a la vuelta a la rutina, a las obligaciones del trabajo, estudios, o incluso la vida familiar más estructurada.
Hoy os quiero hablar del llamado «estrés post-vacacional”, que aunque parezca la típica noticia después del verano, es algo real y bastante común, sobre todo en nosotras, las mujeres, que muchas veces debemos gestionar varios aspectos de nuestra vida al mismo tiempo: la vuelta al trabajo, la familia, las tareas del hogar, y nuestras propias emociones.
Me gustaría daros 5 pautas rápidas y claras de cómo podemos afrontar septiembre sin que se nos venga el mundo encima, y así gestionar este cambio de ritmo de manera saludabl.
Desde la Clínica de Psicología y de la Salud de Valencia y Barcelona, te planteo hay varias estrategias que pueden ayudarte a lidiar con este periodo de transición y evitar que el estrés post-vacacional se apodere de ti. Así que, tranquila, aquí te dejo algunas claves para que este septiembre no sea un dolor de cabeza y puedas retomar la rutina con energía y optimismo.
¿QUÉ ES EL ESTRÉS POST-VACACIONAL?
Desde el punto de vista de la psicología, el estrés post-vacacional se refiere a esa sensación de ansiedad, irritabilidad, falta de motivación o incluso tristeza que aparece cuando regresamos a nuestras actividades diarias después de un periodo de descanso, como las vacaciones de verano. No es algo que afecte a todas las personas por igual, pero es bastante común, sobre todo en aquellas que han disfrutado de un buen tiempo libre y luego deben volver bruscamente a sus obligaciones.
Este tipo de estrés puede manifestarse de muchas maneras: dificultades para dormir, falta de concentración, cambios en el apetito, o incluso desmotivación general. La clave está en entender que esta sensación es temporal y que, con las estrategias adecuadas, puedes superarla sin que afecte de manera significativa tu bienestar.
Si padeces cansancio, te sientes abatida, y crees que puedes estar sufriendo ansiedad, depresión o estrés post-vacacional, contacta conmigo:
1. ACEPTA EL CAMBIO DE RITMO LO ANTES POSIBLE
Una de las cosas más importantes que tienes que asumir cuando llega septiembre es que la vida no siempre puede ser de vacaciones. Es normal que después de semanas de relajación y diversión, la vuelta a la rutina se sienta abrumadora. Pero en lugar de resistirte al cambio, lo mejor es aceptar que es una parte natural de la vida. Y aun más, te diría que sin esa parte de trabajo, esfuerzo y dedicación, las vacaciones no son posibles.
Esto no significa que debas renunciar a la alegría o al bienestar que experimentaste en vacaciones, sino que es fundamental aprender a integrar momentos de calma y placer dentro de tu vida diaria. Piensa en cómo puedes adaptar algunos de los hábitos que disfrutaste en vacaciones a tu día a día. Es genial poder aunque sea con pequeños gestos diarios, alargar esa sensación de bienestar, e incorporarla a tu rutina, y alejar el estrés post-vacacional.
Por ejemplo, si te relajabas caminando por la playa, quizás puedas encontrar tiempo para dar paseos en tu ciudad o practicar alguna actividad que te haga sentir bien.
La clave aquí es la adaptación. En lugar de enfocarte en lo que se acaba, céntrate en lo que puedes seguir disfrutando de manera diferente. ¡Funciona!
2. PLANIFICA LA VUELTA CON ANTELACIÓN
Uno de los mayores errores que cometemos es no planificar bien el regreso a la rutina. A veces nos puede resultar costoso, y no apetecer, pero por mi experiencia personal y profesional, te digo que para evitar el estrés postvacacional es muy importante. Volver de un día para otro, sin tener nada organizado, solo añade más estrés. Si todavía no has vuelto al trabajo o tienes unos días más de descanso, usa ese tiempo para preparar la vuelta de manera más suave.
Algunas ideas que pueden ayudarte:
- Organiza tu agenda: Dedica un rato a poner en orden las tareas que tendrás que afrontar en las próximas semanas. Tener una lista clara de lo que hay que hacer puede reducir la ansiedad.
- Haz la vuelta progresiva: Si es posible, no te pongas metas o tareas enormes los primeros días. Vuelve de forma gradual para que tu mente y cuerpo se adapten poco a poco al ritmo.
Reajusta los horarios de sueño tuyos y de toda la familia: Durante las vacaciones solemos dormir de manera irregular o disfrutar de más horas de sueño. Si quieres evitar el «shock» de volver a madrugar, empieza a reajustar tu horario unos días antes de la vuelta al trabajo y colegio.
3. DATE UN TIEMPO PARA LA «RESACA» EMOCIONAL
Después de las vacaciones, es normal sentir una especie de «resaca emocional». Hemos pasado semanas disfrutando de tiempo para nosotras, para la familia o amigos, y de repente nos vemos de vuelta en la oficina, frente a la computadora o en medio del caos de la vida diaria. Date permiso para sentir esta transición emocional. No te castigues por sentirte un poco baja de energía o desmotivada, es normal sentirse así.
Reconocer que este proceso es normal te ayudará a no sentirte culpable o frustrada. Date tiempo para adaptarte sin presionarte. Quizás la primera semana te sientas más lenta o dispersa, y eso está bien.
4. MANTEN MOMENTOS DE OCIO EN TU VIDA DIARIA
Las vacaciones nos recuerdan lo importante que es el tiempo de ocio para nuestro bienestar. Uno de los mayores errores que cometemos al volver a la rutina es abandonar por completo esos momentos de desconexión y placer.
Incorporar pequeños placeres en tu día a día puede ayudarte a reducir el estrés post-vacacional. Dedica tiempo para ti, ya sea para leer, practicar un hobby, ver tu serie favorita o incluso disfrutar de una tarde tranquila con un café. No subestimes el poder de estos momentos para tu salud mental.
Además, retomar el contacto con amigas y familiares es fundamental. A veces, volvemos a la rutina y nos encerramos en el trabajo o en las tareas diarias, pero mantener esos lazos sociales que disfrutaste durante el verano puede ser una forma excelente de sentirte más conectada y feliz.
5. MENS SANA IN CORPORE SANO
El bienestar emocional está muy ligado a cómo cuidamos nuestro cuerpo. Durante las vacaciones solemos relajarnos con la comida, el ejercicio y el descanso, lo que está perfecto. Pero cuando volvemos a la rutina, es importante restablecer hábitos saludables que ayuden a nuestro cuerpo a funcionar mejor, y por ende, a reducir el estrés.
Come bien, duerme lo suficiente y muévete. No necesitas apuntarte al gimnasio o hacer una dieta estricta, pero pequeños ajustes como caminar más, comer frutas y verduras, y mantener un horario regular de sueño pueden marcar una gran diferencia en cómo te sientes durante este periodo.
Espero que te sirvan de ayuda estos tips sobre cómo evitar el estrés post-vacacional. Si notas que se alarga más de 2 o 3 semanas y que te sientes desmotivada, sin ganas, no te ves capaz de tirar para adelante, no dudes en consultarme. Quizás puedas estar atravesando una crisis, una depresión, etc.
Dale importancia a tu salud mental y ante cualquier duda o cuestión que te preocupe, puedes contactar conmigo, estoy a tu disposición para ayudarte.
Si crees que puedes estar padeciendo estrés post-vacacional, o te falta energía para afrontar tu vida, contacta conmigo:
Estos son algunos de los consejos que pueden ayudarte a superar el estrés post-vacacional.
Puedes ver más consejos sobre este y otros temas en nuestro Instagram, y en el canal de Youtube de la Cínica, espero que te pueda ayudar.
No lo dudes, si buscas una psicóloga en Valencia o Barcelona que sea experta en psicología para mujeres y problemas de estrés post-vacacional, ansiedad, o depresión en Valencia o Barcelona, por favor, contacta conmigo directamente en el 636162020.
Un saludo,
Sara Navarrete
Psicóloga
Teléfono: 636 162 020
info@snpsicologovalencia.es
Sara Navarrete es la Directora del Centro de Psicología Clínica y de la Salud de Valencia y de Barcelona, es Licenciada en Psicología por la Universidad de Valencia (2009) y Psicóloga experta en Autoestima, Dependencia Emocional y Terapia de Pareja.
Paralelamente a su formación en el área de la Dependencia Emocional, Autoestima y Terapia de Pareja ha cursado estudios de Máster en Psicología Clínica (Instituto Superior de Estudios Psicológicos de Valencia), Máster en Psicología Cognitivo Conductual (Instituto Superior de Estudios Psicológicos de Valencia), Máster Universitario en Psicología General Sanitaria (Universidad Católica de Valencia) y Postgrado en Neuropsicología Clínica.
Con una experiencia de más de 10 años, cuenta con un amplio número de sesiones de terapia realizadas hasta la fecha; por ello es consciente de lo complicado que te puede resultar tomar la decisión de pedir ayuda en momentos difíciles, y la de decidir cuál es el profesional más adecuado y más competente para ti. Su objetivo es ayudarte a alcanzar el bienestar y tus objetivos personales.
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