Hoy me gustaría hablaros de 3 reglas de oro para gestionar un conflicto de pareja. Celos, dudas, intereses opuestos, miedo a la pérdida, tristeza, falta de autoestima, falta de atención, falta de madurez…, a lo largo de nuestra vida, y a lo largo de nuestras relaciones de pareja pasamos por etapas diversas en las que se activan determinadas cuestiones que tenemos que superar.
Por un lado, tenemos nuestro enfoque personal hacia la vida y como nos enfrentamos a ella, y por otro lado, en el caso de que tengamos pareja, tenemos que compaginar nuestras etapas de maduración personal, con las etapas de maduración de la otra persona y de la relación en sí. ¡Muchas cosas al mismo tiempo!
A veces, he visto como dos personas que se unen en etapas de maduración distintas, no coinciden sus tiempos para llevar a cabo una relación duradera, y sin embargo, años después, puede que sea su momento, pero sin embargo no se cruzan sus caminos…o sí…la vida da muchos giros inesperados… Sin embargo, a pesar del devenir y de lo fortuito del momento, hay cuestiones que nosotros mismos sí que podemos mejorar, cambiar y solucionar para que seamos dueños de nuestros destinos.
Por eso ante todo, me gustaría decirte que si estás sufriendo un conflicto de pareja, o una crisis, hay que ponerse manos a la obra.
Quiero también desmitificar el hecho de que una crisis de pareja sea algo extraordinario, al contrario, es algo completamente normal, es más, lo anormal es no tenerlas. Los conflictos de pareja son acontecimientos necesarios para que las relaciones maduren y avancen. Forman parte de la normalidad, y por eso, ante todo, me gusta recalcarlo a mis pacientes, para que entiendan que estamos en el buen camino cuando decidimos enfrentarnos a un conflicto.
Por el contrario, negar los conflictos, pasar de puntillas, o dar la razón a la otra persona por miedo al conflicto, son conductas que a la larga, nos van a pasar factura, así que como os digo, ¡manos a la obra!
3 REGLAS DE ORO CLARAS Y DIRECTAS
Apunta, porque son claras y directas, y puedes echar mano de ellas en cualquier momento.
ESCUCHA ACTIVA
Intenta entender a tu pareja, igual que te gustaría que ella lo hiciera contigo, desde el respeto y la escucha sincera. Ten en cuenta que cada uno tenemos nuestra personalidad, sentimientos, y maduración. Si la otra persona está intentando expresar algo importante para ella, escúchala, e intenta entenderla, porque aunque para ti, eso esté superado o carezca de importancia, para la otra persona, tiene importancia.
COMUNICARSE, DISCUTIR, QUE NO PELEAR
Me gusta recalcar que discutir no significa pelear, significa comunicarse, mostrar los distintos puntos de vista que hay sobre una temática. Comunicarse y discutir, es algo enriquecedor porque puedes aprender muchas cosas de la otra persona, su punto de vista te puede resultar de repente clarificador o revelador, porque ve las cosas desde otro prisma. Aprende de la forma de pensar distinta, no intentes cambiarla o sólo validar a los que piensan como tú.
CENTRARSE EN LA SOLUCIÓN DEL CONFLICTO
Es lo más importante, ante todo, tu objetivo y el de tu pareja es llegar a una solución. Más allá de egos, lo importante es que compartas tu vida con un compañero de viaje que te entienda y te quiera, y tú a él. Por ello, ambos tenéis que remar en la misma dirección y hacer un esfuerzo por llegar a un entendimiento. Siempre tenemos que ceder un poquito, ambos, no siempre el mismo, eso está claro.
¡Ya lo tienes! Ahora, intenta ponerlo en práctica. Si tienes dudas o cualquier consulta, o si crees que necesitas ayuda en este proceso de superación, contacta conmigo directamente en el 636162020.
Puedes ver más consejos sobre este y otros temas en mi Instagram, y en mi canal de Youtube, espero que te pueda ayudar. Te pongo a continuación algunos temas relacionados que quizás te interesen:
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Espero haberte ayudado.
Un saludo,
Sara Navarrete
Psicóloga
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